TUL DE NOVIA/ENCAJE/FIESTA

Cualquier mujer quiere verse preciosa en uno de los días más importantes de su vida. Materiales como el tul de novia y el encaje de bolillos son ideales para este tipo de acontecimientos. Si quieres fabricar complementos como vestidos de encaje o diademas de tul para bodas, aquí encontrarás los tejidos necesarios y de la mejor calidad.

Uno de los tipos de tul más demandados son los tul con plumeti. El tul de plumeti tiene una base de rejilla fina y ligera, con caída, blanda al tacto e incluye unos topitos bordados. Aquí verás que disponemos de mucha tela tul plumeti en colores variados y separaciones diferentes entre los topitos.

Aparte, puedes encontrar este tejido en varios materiales, como tul de poliéster o tul de algodón, entre otros.

En cuanto a las telas de encaje, disponemos de una gran variedad de diseños (geométricos, florales…) para que escojas el que más te gusta. Ya sea para un sombrero, tocado, diadema o para hacer ropa interior de encaje o lencería de encaje, aquí tendrás donde elegir. No te pierdas tampoco nuestros velos de novia, auténticas obras de arte.

¿QUÉ ES EL TUL?

El tul es un tejido de tipo encaje hecho a máquina, muy ligero y con forma de red. La finura del hilo le confiere un tacto más suave que el de otros tejidos de encaje.

El tul se puede fabricar con seda, rayón, nailon y otros muchos tejidos. Uno de sus usos más conocidos son las diademas con tul para bodas, velos para bodas y vestidos de novia, pero también se emplea para vestidos de noche y para los tutú de las bailarinas de ballet. El tul puede teñirse de muchos colores.

El término tul proviene de la ciudad francesa de Tulle, lugar en el que se fabrican grandes cantidades de seda y encaje desde el siglo XVIII.

El tul se confecciona dando vueltas con los hilos de la trama alrededor de los hilos de la urdimbre, logrando así un enrejado con un hueco hexagonal que no se enrolla, ni se deforma ni se deshilacha.

¿QUÉ ES EL ENCAJE?

El encaje es un tejido decorativo y transparente adornado con bordados. Su nombre está relacionado con cómo se hacía antiguamente este tejido, ya que se confeccionaba entre los bordes de dos tiras paralelas de lienzo, como si estuviera “encajada” entre ellas. 

Es importante no confundir el encaje con el bordado, siendo lo primero el tejido que la encajera confecciona con hilo y aguja como si fuera un soporte.

El origen histórico del encaje está en la Europa del Renacimiento (siglo XVI), no está claro si en España, Venecia o Flandes (actual Holanda), aunque es cierto que existen antecedentes similares en las antiguas civilizaciones de Oriente. 

En los siglos XVI y XVII se pusieron de moda prendas de encaje como las lechuguillas, las gorgueras, los cuellos, los vuelillos en las bocamangas o los cortinajes. Esto contribuyó al desarrollo de esta industria, que se extendió por los principales países europeos.