HILOS

El hilo de coser es, junto con la aguja, el material más importante para la costura. Ya seas un/una profesional del sector o una aficionado/a, aquí podrás aprovisionarte de los principales tipos de hilos del mercado de la mejor calidad.

En cuanto al material de nuestros hilos, aquí encontrarás todo lo que puedas necesitar en tus trabajos. Hilo de seda, hilo de poliéster, hilo de nylon, hilo de viscosa, hilo de rayón o hilo de algodón son algunos de ellos. Tenemos algunas bobinas de hilo especiales, como las de hilo metalizado o las de hilo elástico.

En cuanto a los colores, podrás comprobar que tenemos de todos los tipos que puedas desear. ¡Hazte ya con cualquiera de ellos en distintos grosores y en bobinas con hasta 5 km de hilo!

¿QUÉ ES UN HILO DE COSER?

Un hilo de coser es una hebra larga y muy fina de un material textil trenzado. Su forma y modo de fabricación es muy similar al de los cordones o las cuerdas, si bien en versión mínima.

A excepción de la seda y de las fibras sintéticas, la mayor parte de las fibras textiles son muy cortas, por lo que es necesario proceder a su hilado para crear un hilo continuo y más largo. Esta operación, que se suele llevar a cabo en una hilandería, consiste en retorcer varias fibras cortas juntas para unirlas, creando así una hebra de mayor longitud. Aproximadamente, cada hilo de coser está compuesto por unas 30 fibras de tejido.

Se sabe que el Homo Sapiens empezó a crear hilos con fibras vegetales hace unos 20.000 años. Hasta la Revolución Industrial del siglo XIX se hilaba de forma manual o, preferiblemente, mediante máquinas como la rueca o el huso.

¿QUÉ SON LAS TELAS?

Las telas o tejidos son materiales con forma de lámina que se fabrican mediante el cruzamiento y enlace de hilos o fibras. 

Cuando este proceso se produce con hilos longitudinales (urdimbre) y transversales (trama) se llaman ‘tejidos de calada’. Cuando se hace por lazadas que forman una malla se llaman ‘tejidos de punto’ o ‘tricotados’. También pueden hacerse con el cruzamiento de dos o más hilos de la urdimbre, sin trama, como algunos tipos de tules.

La industria textil recibe el nombre de tejeduría. La fabricación de telas de fibras naturales, artificiales o sintéticas, junto con sus múltiples combinaciones, generan una gran variedad de tipos de telas.

El hombre creó diversos tipos de tejidos para proteger su cuerpo y sus hogares de múltiples fenómenos climáticos (calor, frío, lluvia, viento, luz). En el neolítico se empezó a hilar el lino para el verano y la lana para el invierno, para lo cual inventaron el huso y el telar. Tiempo después empezaron a crearse todo tipo de accesorios, herramientas y complementos con el tejido, entre ellos los sombreros.

El diseño de los telares fueron refinándose con el paso de los siglos, pero a grandes rasgos no sufrió cambios trascendentales hasta la inclusión de la máquina de vapor. Así nació el telar industrial, el cual multiplicó drásticamente la producción de tejidos, abaratando así su precio.